¿LA REVOLUCIÓN? SÍ, LA REVOLUCIÓN

Hacia el IX Congreso del PCPE (4, 5 y 6 de diciembre)

¿LA REVOLUCIÓN? SÍ, LA REVOLUCIÓN

Hoy, la lucha es por popularizar la revolución como la alternativa superadora de esta sociedad del paro, el individualismo, la marginación, el consumismo y la alienación, que tiene como base la explotación del trabajo asalariado.

Es por ello que el IX Congreso del PCPE se prepara trabajando para fortalecer al partido como un instrumento de lucha por el socialismo, sistema social al que únicamente se llega mediante la revolución.

El capitalismo devasta la sociedad

La expresión actual de la crisis del capitalismo muestra la enorme devastación social, cultural, medioambiental y política alcanzada por ese sistema.

La devastación social tiene manifestaciones tan concretas como el crecimiento acelerado del desempleo y del empleo precario; la vuelta a la jornada de trabajo extenuante; el debilitamiento paulatino y pérdida de los sistemas de protección social ante situaciones de enfermedad, incapacidad laboral, vejez, orfandad, viudedad o paro; el aumento del embrutecimiento y de la violencia en la vida cotidiana; etc.

En el aspecto cultural, la uniformización impuesta por la guerra ideológica que libra el imperialismo implacablemente segundo a segundo está liquidando las culturas nacionales en un plazo histórico tan breve que borra las identidades colectivas sin tiempo para la recreación social de la identidad, extendiendo el desarraigo y el extrañamiento como la nueva cultural de los individuos.

La crisis medioambiental ocasionada por la explotación y transformación en tiempo record –últimos 80 años- del medio natural pone al planeta al borde del infarto ecológico.

La recuperación por el capitalismo de la casi completa hegemonía ideológica ha traído una devaluación grave de los valores y prácticas de democratización, un aumento de la jerarquización, verticalismo y autoritarismo en el ejercicio de la dirección política y de gobierno y una reducción a papel marginal de las instituciones representativas, convertidas ya plenamente en meras legalizadoras de los designios del gran capital.

La revolución da el poder al pueblo

Esta devastación integral producida por el capitalismo en los últimos decenios es de una magnitud mucho mayor que las generadas en etapas anteriores y que salieron a la superficie en las grandes crisis de 1873, 1929 y 1973. Con ello queda demostrado, una vez más, la incapacidad del capitalismo para dar soluciones justas a las necesidades de las grandes mayorías y su inherente capacidad para llenar de sufrimientos y calamidades a los pueblos, a la humanidad. Por ello es preciso y urgente popularizar la revolución como la única respuesta superadora de la actual sociedad de injusticia.

Como podemos leer en el artículo de los camaradas griegos publicado en el  número 1 de la Revista Comunista Internacional –www.pcpe.es-, “las contradicciones internas del capitalismo y el antagonismo capitalista internacional han alcanzado un nivel en el cual la clase obrera y los sectores más bajos de las capas medias únicamente pueden frenar el deterioro de su posición si contraatacan, si abandonan las trampas políticas del compromiso, del consenso, de la aceptación de una supuesta “colaboración de clases” para hacer frente a la crisis”, confrontando con la socialdemocracia de los llamados partidos socialistas y del PIE (Partido de la Izquierda Europea), que “funcionan como obstáculo ideológico-político en el desarrollo de la lucha de clases, en la maduración de la conciencia política, fomentando ilusiones de un capitalismo más humano y justo mediante una justa redistribución de la riqueza. Ocultan conscientemente que la fuente de la riqueza es la explotación del trabajador por el capital y que las relaciones en la esfera de la distribución se definen por las relaciones de propiedad sobre los medios de producción”.

La historia de la lucha social y política de la clase obrera y sectores populares muestra fehacientemente que sólo la lucha revolucionaria da poder al  pueblo, que sólo las revoluciones triunfantes que acaban con la propiedad privada ponen en manos del pueblo el poder por largo tiempo. Así ha sido con las revoluciones rusa, yugoslava, china, vietnamita o cubana. Las reivindicamos como las grandes victorias de los pueblos en el siglo XX y como primeras experiencias duraderas de sociedades fundadas sobre bases solidarias. La revolución para la que preparamos al PCPE habrá de traer un socialismo superador del capitalismo y de toda cultura de dominación.

Juan Rafael Lorenzo

2 Respuestas a “¿LA REVOLUCIÓN? SÍ, LA REVOLUCIÓN

  1. comparto articulo …a luchar hasta la victoriaaaaaaaaaaaa¡¡¡¡¡¡¡¡¡

  2. viva la revolución comunista !!!!

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